Los pediatras y nutricionistas coinciden en la importancia de realizar cinco comidas al día. Cuando se trata de niños/as, es importante mantener esta cantidad para garantizar que tengan la energía necesaria a lo largo de todo el día. La ingestión de alimento más importante es el desayuno. Un niño/a nunca debe quedarse sin desayunar.
Es importante que los niños/as se impliquen en la alimentación. Es bueno hacer la compra con ellos para que comiencen a familiarizarse con los diferentes grupos de alimentos, contándoles qué vamos a comprar y cómo lo van a comer.
También resulta positivo procurar que los niños/as sean nuestros "pinches de cocina". Esta idea resulta divertida, permitiéndoles tocar y manipular algunos alimentos. Disfrutarán mucho si los dejamos remover, batir, mezclar...
¿Qué ocurre si los niños/as no desayunan? Algunas de las consecuencias de no desayunar son el decaimiento, la falta de concentración y el mal humor, debido a la falta de glucosa (nuestro principal combustible) que produce el ayuno. Hay que recordar que, a primera hora de la mañana, nuestro organismo lleva ya entre ocho y diez horas sin ingerir ningún alimento. La falta de glucosa empuja a nuestro cuerpo a quemar otras reservas energéticas, lo que causa alteraciones en su funcionamiento. De ahí que sea tan necesario el desayuno en todas las etapas de la vida, especialmente en la infancia y la adolescencia.
Un buen desayuno debe asegurarnos los nutrientes necesarios para contar con la energía suficiente para afrontar bien el día, puesto que es el combustible inicial.
El desayuno ideal debe contener:
- Cereales. Proporcionan hidratos de carbono que aportan energía, vitaminas y minerales.
- Lácteos. Contienen proteinas de calidad, calcio y vitaminas A,D y B.
- Frutas. Aportan hidratos de carbono, agua, vitaminas, minerales y fibra.
- Derivados cárnicos. Jamón cocido o serrano, fiambres poco grasos (de pollo o pavo), embutidos...Contienen proteinas de calidad y cantidades variables de grasa.
Para motivar a los niños/as se les puede confeccionar en casa un calendario de desayuno sano semanal, donde irán marcando los productos que han desayunado. Al terminar la semana comprobarán si son los campeones de los desayunos sanos.